Cóctel de gambas

Ingredientes: 350 gr de gambas 350 gr de lechuga romana 8 tomates cherry 8 cebolletas en vinagre 1 rodaja de piña 2 cucharadas de maíz dulce Para el aliño: 125 ml de mayonesa o salsa rosa 3 cucharadas de tomate frito 1 cucharadita de limón ½ de pimentón picante Cómo preparar un cóctel de gambas Esta receta se cocina en un abrir y cerrar de ojos. Es ese pequeño placer que tendremos siempre preparado para materializarse. Como cualquier receta que tenga marisco, podemos usar un producto fresco o congelado. Las gambas al igual de los langostinos son un buen fondo de congelador. Si tenemos la oportunidad de hacernos con un producto fresco, bien de precio, no debemos desperdiciarlo. Podemos comprar gambas cuando estén más baratas y congelarlas, la diferencia se nota. Buscamos siempre en la sección de congelados los mejores. Las gambas peladas y congeladas son una opción, aunque siempre es mejor un producto con piel de calidad y buen tamaño. El primer paso para preparar este sencillo cóctel es cocinar las gambas. No necesitarán una gran elaboración, como mejor están es hervidas. El marisco no necesita grandes elaboraciones para estar de vicio, solo sencillos pasos que lo llevarán a brillar con luz propia. Preparamos un cazo con agua, le añadiremos un poco de sal al gusto. Para darle sabor y ese toque tradicional, incorporamos la hoja de laurel. Esperamos a que el agua empiece a hervir. Cocinando de esta manera las gambas, no será necesario descongelarlas, las podemos cocinar directamente sin descongelar. Las gambas tienen un ciclo de cocción muy corto. Si nos pasamos nos quedarán demasiado cocidas y no disfrutaremos con su textura, se secarán, además de que serán costosas de pelar. En unos 3 minutos, las gambas estarán preparadas, siempre es mejor que nos ofrezcan esa textura suave que queremos ver en ellas. Cuando estén cocinadas, las escurrimos. Las podemos poner en agua fría con cubitos de hielo para que se enfríen más rápidamente. Pelamos las gambas, les podemos dejar la cola para que sean más fáciles de coger y tengan un aire más bonito. Uno de los elementos que hace que el cóctel destaque es su presentación. Las gambas que son las protagonistas de esta receta estarán preparadas. Nos faltará preparar el aliño el elemento que le dará color y sabor. Para este aliño colorido usaremos una mayonesa o salsa rosa, podemos hacerla al momento o comprarla lista. La mayonesa es una de las recetas más fáciles de preparar que existen. Ponemos un huevo en el vaso de la batidora. Añadimos una cucharada de zumo de limón, sal y aceite de girasol o de oliva. Batimos con la batidora hasta que emulsione y nos quede una salsa fina de lujo. Con la mayonesa lista, le añadimos las tres cucharadas de tomate frito y el pimentón picante para darle un poco de gracia. Este es el aliño de un cóctel de gambas más sencillo que existe, podemos cambiar la mayonesa por la salsa rosa, es una buena opción para que nos quede un complemento a las gambas de lujo. Preparamos una ensalada que se colocará en el fondo de este cóctel. Usaremos una lechuga romana. La lavamos bien y troceamos hasta que nos quede un buen fondo de cóctel. Ponemos las cebolletas en vinagre cortaditas, tendrán ese sabor avinagrado que combinará muy bien con el marisco. Para darle color añadimos los tomates Cherry o naturales, con uno o dos, será suficiente. Los lavamos y cortamos en trocitos. El contraste de sabor lo conseguiremos con el maíz dulce, escurrimos y colocamos con el resto de los ingredientes. La estrella de este cóctel acabará siendo la piña. Si es natural mucho mejor, es un alimento diurético de sabor dulce, no necesitará el almíbar. Llega el momento de la presentación. Troceamos algunas gambas y las mezclamos con la ensalada, las más bonitas las guardamos para decorar. Colocamos el fondo de ensalada en el vaso o cuenco de presentación y encima colocamos las gambas. Podemos servir este cóctel de gambas con un poco de hielo, muy fresquito o con un zumo de tomate que lo acompañe. Tendremos lista una receta de restaurante en un abrir y cerrar de ojos. Atrévete a cocinar tu propio cóctel de gambas, el resultado te enamorará al primer bocado, queda de vicio.